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sábado, 5 de febrero de 2011

Muy contento

¿La semana?. La verdad es que no ha estado mal; no puedo quejarme. Lo mejor de todo ocurrió el martes, ese día sí que lo acabé particularmente contento.Contento en concreto por tener todo mi culito unido sin cortes ni desgarros (sin ningún tipo de connotación sexual). El caso es que, en el trabajo, fuimos a comer al sitio de siempre. Era temprano, sobre la 1, porque tenía una reunión a las 2 (por cierto, cuando digo que la semana ha sido buena, me refiero a lo extralaboral, lo laboral cuenta o no para la semana según me parezca :-D).

El restaurante estaba prácticamente vacío, solo una persona creo que compañero de empresa de un amigo, al que conozco de vista. Esta persona estaba en la mesa de al lado de la que solemos sentarnos, un pelín retrepado viendo algo en su iPad o similar. Con el fin de no molestarle y habida cuenta de que aquello estaba completamente vacío, fuimos a otra mesa. Dos mesas más allá para ser exactos. Fueron unos segundos de indecisión porque mi compañero (y además vecino) y yo creo que dudábamos sobre si el otro tendría alguna preferencia en particular. Al final no sé si decidimos los dos o decidí yo que iba primero. Tras esos momentos de indecisión y para no darle además más vueltas, nos sentamos tal como estábamos, cambiando lo que suelen ser nuestras posiciones habituales. Esta vez yo miraba hacia la barra del bar ...

Bueno, eso de que nos sentamos es un poco atrevido. Él se sentó y yo lo intenté pero no pude. Me reincorporé al sentir que había topado con algo duro, muy duro. Pensé que quizás había puesto la cartera sin darme cuenta en el asiento, aunque no era probable pues no recordaba haberla sacado del
bolsillo ni tampoco es algo que se te caiga así como así. Miré hacia el asiento para ver qué es lo que había y cuál no sería mi sorpresa al ver media copa rota en el mismo. La copa estaba en una posición algo inestable aunque tan inexplicable como afortunadamente me había sentado sobre ella y ni me la había clavado ni se había roto. La cogí, la puse en la mesa mientras trataba de asimilar aquello y no puedo recordar exactamente cómo estaba pero todo parece indicar que, afortunadamente de nuevo, la parte pulida estaba hacia arriba y era la que se había llevado la peor parte :-).

Se lo comenté a los camareros con los que tengo confianza (uno de ellos es además amigo) y me dijeron que había sido el yerno del dueño, el "enchufado". Yo intuía que era el yerno del dueño porque mientras que sus compañeros van siempre que parece que se hayan tomado un éxtasis, él parece que se haya tomado un valium. No dije nada más aparte de aquello y creo que no solo porque los conociera, a algunos personalmente. Probablemente si me hubiera pasado en otro sitio tampoco hubiera dicho nada. Otros en cambio seguro que hubieran formado una buena.

A veces me gustaría ser así, pero no me sale :-).

También hay otros motivos para estar contentos, aunque estos la verdad es que más banales, muchísimo más banales y que, en todo caso, solo tienen relación con el prurito de haber acertado diez veces seguidas el resultado de tirar al aire una moneda cargada o, dicho de otra formar, de haber pasado diez rondas en copa de Hattrick.

A ver, Hattrick tiene 73.000 usuarios en España. De esos, yo suelo estar entre los 1000 primeros. A veces entre los 300 y los 700 (cuarta división), a veces el 1000 y poco (entre los primeros de quinta división). Visto como percentiles, suelo estar por encima del 98 ó del 99 o lo que es lo mismo, de cada 100 equipos solo uno o dos, como mucho, son mejores que el mío. Luego aparte de eso habrá que ver los equipos que han ahorrado durante mucho tiempo simplemente para armar un equipazo de estrellas y vivir durante unos meses en una división alta, pero esa táctica es tan legítima como otra cualquiera y por tanto no es criticable.

Los datos anteriores ya inflan algo tu ego, de forma tonta ya lo sé, pero lo inflan. Sin embargo, hay más. En copa entran 32000 equipos aproximadamente (exactamente serían 2^15=327628 equipos. De esta forma, al cabo de 15 eliminatorias queda un único campeón. Un equipo de mi nivel, o el mío al menos, suele llegar de media a la ronda quinta, sexta o séptima. Las primeras son fáciles porque te enfrentas a rivales muy inferiores pero a partir de la cuarta o quinta ya te enfrentas a rivales que son casi como tú, pero además juegas en su casa.

Es lógico, tras cuatro eliminatorias quedan 2^11 = 2048 rivales. Lo más normal es que estén entre los 2000 mejores, aunque alguno habrá que se haya ido colando a base de suerte. Pues bien, si eres el 700 y juegas contra el 1400 en su campo, normalmente el partido no es fácil. Es más, si él juega con sus titulares porque quiere pasar ronda a toda costa para batir su récord y tú juegas con suplentes (o la mitad de ellos) porque quieres minimizar los problemas con las lesiones, tarjetas, etc. el partido se iguala todavía más. Y si encima quieres jugar relajado para tener ventaja en liga, todavía más.

Si tienes suerte y pasas la séptima ronda, el número de equipos restantes es de 2^8=256. El nivel ya empieza a ser de consideración y los que tuvieron demasiada suerte, es más que probable que ya hayan dejado de tenerla. En concreto en mi caso tuve suerte porque la séptima ronda me enfrenté a un equipo de nivel parecido al mío pero que era también de Andalucía por lo que partía con menos desventaja que si hubiera sido de cualquier otro sitio y no solo eso, por haber subido la temporada anterior de quinta división a cuarta, pude jugar la octava ronda en mi campo, algo que simplemente cambia las cosas.

Así que no solo pasé la octava ronda y la novena y la décima contra equipos muy fuertes que, parcialmente por estrategia, parcialmente por suerte, acabaron mordiendo el polvo. Y esa es la situación actual, undécima ronda, 2^5= 32 equipos en liza, dieciseisavos de final. El partido será muy complicado pero algunas opciones sí que tengo. Digamos que un 30-70 o incluso un 40-60. De ganar, pasaría a octavos, solo 16 equipos en liza, de los 32.000 que iniciaron el periplo. En cualquier caso, de ocurrir, ya lo celebraré. Por ahora, simplemente el récord personal de la undécima ronda ya es para celebrarlo. Aunque suponga tirar la liga :-(.

Y para terminar tanto HT, cambiemos a algo más interesante pero también relacionado con el fútbol. Esta mañana el partido ha estado bien. Me he encontrado casi en mi mejor forma; perder ese par de kilillos que se resisten desde las navidades y poco más. A ver si poco a poco lo vamos consiguiendo.

Un saludo, Domingo.

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